PRIVADA CATORCE
RESIDENCIAL
El elevador se abre al vestíbulo que delinea su estética espacial con el protagonismo visual del particular muro del fondo: el patrón natural del mármol panda white en blanco y negro nos remite a la sofisticación de una prueba Rorschach como primer atisbo del singular diseño de este departamento.
Nos recibe un espejo de piso a techo —cubriendo lo que antes era una ventana— propiciando una inmediata intimidad de alojamiento. El muro espejo está dispuesto perpendicularmente al muro de mármol blanco y negro. Refleja a su vez el salón principal para intensificar la sensación de infinito. El espacio se abre y continúa con un muro de lambrín de madera estriado en forma de L que es apreciable desde la entrada; este muro es el eje vertebral que distribuye los espacios. Sobre este muro se van abriendo y cerrando las diferentes puertas, todas al alto brillo, y los vanos de las diferentes habitaciones.
La estancia y comedor del salón principal remata al fondo con otra pieza monocromática de mármol white panda. Este detalle es un claro eco de resonancia del mármol del vestíbulo y funciona además como un trinchador oculto para el comedor que dará servicio a sus futuros comensales. El piso de la sala de cuarcita black macaubas contrasta con la madera de los muros, afianzando una dualidad que dota de equilibrio al espacio.
La estancia con una sala modular y un juego de mesas de centro —ambos a juego con esquinas redondeadas— miran hacia una pintura circular en un contrastante degradado azul de la galería Atrium. El conjunto de líneas curvas brinda dinamismo al interior y una terraza funciona como los pulmones del salón principal extendiendo su programa social con un comedor para exteriores. Un muro verde da vida a la terraza, donde una puerta de cristal es el umbral de conexión entre interior y exterior, agrandando el espacio visualmente.
Cada rincón del proyecto posee un cuidadoso diseño funcional y estético, detallado en su ejecución pero sutil en su expresión hasta el área de servicio, cocina y alacenas.
AÑO: 2021
FOTO: LGM STUDIO
Cuajimalpa, Ciudad de México.
El muro estriado de madera se desvanece en una parte de la estancia formando una celosía de madera que da entrada al family room: enmarcado por un muro-vitrina que funciona como una galería que nos recuerda a los antiguos gabinetes de curiosidades. El muro-vitrina está iluminado con una luz más cálida que el antecomedor y la sala de tv que forman el espacio. Este muro exhibe libros, oculta la puerta hacia la cocina y muestra objetos de colección y futuras piezas de arte en una gama de colores intensos y degradando a una blanco y negro. El sofá del área de tv en gris y verde va a juego con el monolito del mármol verde alpi de la mesa del antecomedor.
La iluminación general de todos los espacios viene de cajillos de rieles lineales magnéticos de la marca Ilux, hundidos en el plafón y enfatizando los muros de madera. Los rieles se extienden desde la sala hasta los pasillos y el family room donde el cajillo se torna perirmetral y baja como escurriendo del muro hasta el suelo. Hay además acentos de candiles dramáticos sobre las mesas de los respectivos comedores como la lámpara Q3 de Baxter con 300 focos sobre la mesa principal. Una lámpara de piso escultórica parea la única columna visible entre la sala y el comedor.
Al descubrir las puertas de las diferentes habitaciones que están ocultas en el lambrin estriado de madera podemos apreciar el baño de visitas que duplica su espacio de manera visual con espejos de bronce que reflejan la madera en los muros y el lavabo monolítico en mármol rosso lepanto.
El pasillo de madera que da a las recámaras está coronado con una pieza en forma de dona-espejo reflectante deformando la ortogonalidad y rompiendo la rigidez del espacio transitorio. Las recámaras, continúan los acabados de madera natural en muros y pisos dando una sensación acogedora. La cabecera de la recámara principal está enmarcada por un rodapie de mármol gris era silver y por dos libreros empotrados. Un par de sillas capitol complex de la marca Cassina y una silla peluda blanca para el tocador hacen juego con todos los tonos tierra del espacio dando uniformidad visual. El baño principal está recubierto de mármol negro marquina en los muros y de mármol blanco thassos en el piso con repisas iluminadas que asemejan mostradores. Estos colores generan un contraste con un juego de materiales suntuosos pero de formas sencillas.
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Los otros baños de las dos recámaras secundarias están recubiertos de mármol blanco statuarietto en contraste con los accesorios y la manguetería negros que junto con la iluminación indirecta generan una sensación más íntima articulado en el lenguaje de lo que puede verse como un guiño a un artdéco contemporáneo.
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